El Ayuntamiento quiere sacar provecho al futuro embalse con un proyecto que aprovecha la gran lámina de agua generada.
Cuando acaben las obras del embalse de Almudévar, tendremos, a apenas 2 kilómetros, un gran lago artificial, de 1.050 hectáreas, al que puede dar un uso lúdico y deportivo. El Ayuntamiento ya ha encargado un estudio para acometer proyectos de turismo sostenible, poner en valor el patrimonio etnológico agrícola a través de varias edificaciones expropiadas para hacer la presa y diseñar un área recreativa de actividades deportivas y de ocio.
"Queremos sacar provecho al embalse y estamos estudiando diversas acciones que acometeremos cuando acaben las obras", afirma el teniente de alcalde, José Luis Abad, que esta semana ha visitado con los técnicos las dos zonas donde se plantean los nuevos usos.
Una zona es la Rinconada, donde se levantan una serie de edificaciones agrícolas que expropió la Confederación Hidrográfica del Ebro. Allí hay corrales, un almacén y una vivienda, protegidas como patrimonio etnográfico, que el organismo de cuenca ha ofrecido ceder al Ayuntamiento si le da un uso adecuado.
Las construcciones están hechas con sillares de piedra arenisca. "La CHE nos ha pedido una memoria de lo que queremos hacer y hemos encargado el estudio a una empresa de ingeniería", comenta el concejal. El Ayuntamiento quiere rehabilitarlos para realizar en ellos actividades de ocio y al mismo tiempo un centro que recuerde su pasado ligado al mundo agrícola y ganadero y su presente vinculado a las infraestructuras hidráulicas y los regadíos.
Las edificaciones estarán al nivel de la lámina de agua cuando se llene el embalse. Todavía habrá que esperar para ello, ya que las obras acabarán este año, pero queda un tiempo hasta la puesta en carga.
"Se expropiaron casi 5 hectáreas en esa zona y solo se inundan la mitad", explica José Luis Abad, que dice que cerca estará la playa del embalse. Esto facilitaría que además de un uso cultural se pudieran construir equipamientos náuticos. "Sería algo modesto, como lo que existe en otros embalses, La Sotonera o Barasona", señala el teniente de alcalde, que deja claro que se preservarán y rehabilitarán los edificios.
Una vez hecho el estudio técnico se buscarán líneas de ayudas como los programas experienciales de empleo y formación para ir desarrollando los proyectos. "Es una gran apuesta de futuro ligada al nuevo pantano que genera nuevas oportunidades de desarrollo para nuestro municipio", señalan desde el Ayuntamiento.
La delegación que visitó la Rinconada, encabezada por el teniente de alcalde y el concejal de Medio Ambiente, Joaquín Abiol, estaba formada por la directora del programa experiencial que se está llevando a cabo en Almudévar, Miriam Sancho; el ingeniero Ramón Perales, de Isofor Soluciones Forestales, que hará el trabajo; y la agente de empleo y desarrollo local, Paula Lasierra.
Otra de las iniciativas se desarrollará en una península surgida en el embalse, donde se reubicará la ermita de Santo Domingo, que en su actual emplazamiento quedaría inundada. La empresa constructora sacará piedra a piedra una pared medieval y la trasladará hasta allí, donde además construirá la nueva ermita. Los terrenos los ha comprado el Ayuntamiento, que quiere hacer en torno al templo un área recreativa. Desde aquí, una de las zonas más altas, se cuenta con unas impresionantes vistas.
Además de estos dos proyectos, el embalse permitirá realizar un recorrido perimetral de 22 kilómetros por un camino apto para senderistas o ciclistas. Para cerrar el círculo, faltaban 3 kilómetros, que la constructora del embalse está acondicionando. La senda recorre las dos espectaculares presas (una de 2,4 km situada en Almudévar y otra de 3.5 km en Huesca) y los cuatro municipios con terrenos en el embalse: Almudévar, Tardienta, Vicién y Huesca.
cat: Fomento y desarrollo, vaobulcary: 2661559